El cuento de ZP-MOU ¿¿Porqué, porqué, porqué, porqué?? se preguntan los dos. Ambos están viendo que su mundo ideal se les viene abajo, se hunde ante ellos, no lo entienden, no se lo explican. Hasta hoy todo les había ido muy bien, es más… les había ido de narices, aunque en el fondo y a pesar de su soberbia, los dos saben que no han hecho nada especial para conseguir triunfos. Los dos han comprado voluntades mientras iban montados en el tren del poder y es que los halagadores salen de debajo de la tierra cuando todo va bien y desaparecen cuando la situación se tuerce, cómo les está ocurriendo ahora.
Ambos profesan el victimismo, ese curioso disfraz que busca desprestigiar de una forma burda la argumentación del adversario con tal de convertirse en victimas de las circunstancias y hacernos pensar que ellos han hecho todo lo que se podía hacer y sólo los “elementos” han conseguido derrotarles.
Un claro ejemplo para poder identificar mejor la situación, han sido las declaraciones que ambos han hecho a los medios la semana pasada:
ZP: “No tenemos una varita mágica para acabar con un paro que nosotros no hemos generado” Santa Cruz de Tenerife 30/04/2011
MOU: “Mi responsabilidad por la derrota ante el Barça es cero” Madrid 27/04/2011
Ambos utilizan la misma estrategia de no proponer juego ni dejar jugar a los demás, su falta de ideas les lleva a la bronca continuada y así intentar ocultar sus propias deficiencias y debilidades, dicho de otra manera “ni comen, ni dejan comer”
Lo más curioso del caso es que durante éste mismo mes de Mayo, el futuro les puede estar reservando otro paralelismo en sus vidas. ZP puede perder las elecciones por goleada y MOU se puede llevar otra "manita" contra el Barça. Si esto ocurre y es muy fácil que ocurra, la decencia les debería plantearse la dimisión cómo mal menor para los suyos y para los demás, pero quizás, y también es fácil que ocurra, su vanidad y narcisismo no se lo permitirán.