viernes, 24 de enero de 2014

“Vender o no vender, esa es la cuestión”. 20 Consejos para no morir en el intento.

 

1.       ¿Qué tiene tu producto de especial para que haya personas que se puedan interesar en él? ¿Calidad, Servicio, Rapidez, Precio, Compromiso?

2.      Ofrece un lenguaje personal, amistoso y lo más cercano posible.

3.      Consigue que los clientes lleguen a identificarse contigo.

4.      Transmite que sabes lo que estás haciendo.

5.      Asegúrate que la descripción de tu producto o servicio esté perfectamente claro y detallado. Simplifica el lenguaje, que sea claro y sencillo.

6.      Consigue que el cliente se convenza de que contigo puede obtener algunas de las siguientes ventajas, aumentar negocio, ganar tiempo y esfuerzo, tener confianza.

7.      ¿Qué tipo de ventaja o valor añadido tiene tu oferta para el cliente?

8.      Encuentra el modo de demostrar de que tu producto es la mejor de las ofertas.

9.       Consigue que tu mensaje llega a las personas adecuadas. ¿Quienes desean ver tu oferta y estarían dispuestos a comprarla?

10.   Escucha lo que tus posibles clientes te dicen. ¿Hay todavía algo que tus clientes no tienen claro suficientemente? ¿Algo que les preocupa sobre tu oferta?

11.   Muestra testimonios de casos reales donde se aprecien las ventajas de tu oferta.

12.  No te olvides de las Redes Sociales, no es solamente hablar, se trata también de saber escuchar. ¿Cuáles son las quejas más frecuentes de tus clientes potenciales en Twitter, en Facebook, en LinkedIn o en foros?

 
13.  Si utilizas a menudo la palabra “nosotros”, quizás deberías cambiarla por “yo”, ofrecerás una imagen menos “corporativa” y por lo tanto menos fría.

14.  Cuantifica los beneficios que ofrece tus servicios y muéstralos a tus clientes.

15.   Simplifica tu oferta, que sea muy fácil de entender. Las ofertas complicadas pone nerviosos a los clientes.

16.  El titular de tu prospecto debe ser increíblemente fácil de leer. Utiliza frases cortas pero que tengan fuerza.

17.   No propongas demasiadas opciones en tu prospecto o el cliente podrá confundirse. Como mucho muestra 3 opciones - Oro, Plata y Bronce.

18.  No tengas miedo en repetirte a ti mismo. Repite tantas veces como sea necesario las bondades de tu oferta.

19.  Recuerda, solamente obtendrás beneficio de tus clientes si inicialmente ellos han obtenido beneficios de ti. El negocio únicamente prospera si ambas partes se benefician.

20. Si el cliente no compra tu oferta inicial, intenta ofrecer otra alternativa más económica, si puedes. Incluso la venta más pequeña te da la opción de no perder el cliente y hacerlo crecer en el futuro. Construir un listado de clientes y conseguir su fidelidad es lo más sabio que puedes hacer para tu negocio. 

1 comentario:

Anónimo dijo...

Toda la razón. Ana Belén